Conocía ya la marca a través de su página web y sinceramente me gustaban bastante las prendas y sobre todo los precios. Así que emprendí la excursión con curiosidad y con ganas.
La tienda, enorme, está situada en la primera planta del centro. Sorprende la decoración, mucho más cálida que en otras tiendas del estilo, con colores amarillos, blancos, dorados, cristales.
La ropa tiene muy buena pinta, hay de todo, bonito y, lo más importante, diferente a lo que estábamos acostumbrados. Ellos dicen que venden moda y no prendas en serie y es cierto, pero la moda se paga y aquí viene el punto negativo.
Forever 21 es caro. Se había dicho que podrían competir con Zara, Blanco e incluso Primark (de hecho en los precios de la web así lo parecía), pero eso no es así. Forever 21 es caro, yo diría que más caro que Zara. Eso sí, como he dicho antes, es diferente.
Habrá que ver como se comportan en rebajas.
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